Sin duda, una de las frutas de verano más apreciada son las cerezas, pero tienen dos inconvenientes: que su temporada es corta y que son frágiles; de ahí la importancia de saber cómo conservarlas
La temporada de cerezas va de mayo a julio.
En España se producen gran variedad de cerezas. Las picotas, que son una variedad de cereza de la zona del Jerte, maduran un poco más tarde; podemos encontrarlas desde mediados de junio hasta agosto. Las picotas son menos ácidas y tienen un sabor más dulce.
En 101 blog de cocina os queremos dar algunas recomendaciones para conservar las cerezas:
Las podemos consumir tanto frescas como cocinadas en: tartas, helados, mermeladas, licores (Kirsch) y como acompañamiento a algunas carnes en salsas tipo chutney.